Son muchas las molestias que se pueden manifestar luego de recibir una vacuna. Son respuestas normales a la inyección de sustancias extrañas en nuestro cuerpo.
Para muchas personas, un pinchazo de una vacuna no significa nada. Mientras que para otras, en las horas posteriores a la inoculación, desarrollan dolor en el brazo, según advierten informes y datos publicados. Según los investigadores se trata de un efecto secundario común y presente para todas las vacunas, no solo las que combaten el virus SARS-CoV-2.
Los expertos afirman que los dolores en el brazo e incluso hasta ciertas erupciones cutáneas son respuestas normales del organismo a la inyección de sustancias extrañas en nuestro cuerpo. Deborah Fuller, experta en vacunología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en Seattle, explicó: “Manifestar esa reacción en el sitio de la aplicación es exactamente lo que esperaríamos que hiciera una vacuna que intenta imitar un patógeno sin causar la enfermedad”.